La baja de Carlos Alcaraz en el torneo de Basilea por sufrir una lesión en la fascia plantar del pie izquierdo y fatiga muscular en la zona lumbar, tal y como lamentó el propio murciano este miércoles en sus redes sociales, supone un alto en el camino del español para volver a ser el número uno.
Las opciones del joven tenista para arrebatar a Djokovic lo más alto del ranking, con 500 puntos más que Alcaraz, pasa por firmar una recta final de curso prácticamente perfecta, con el Masters de París y las ATP Finals de Turín como fechas marcadas en rojo en el calendario.
En estos dos torneos, en los que como máximo puede sumar 2.500 puntos, tendrá que ser superior al serbio, que lleva sin competir desde hace más de un mes, cuando disputó la fase de grupos de la Copa Davis en Valencia.
En el Masters de Paris, Alcaraz deberá llegar a la final para sumar 600 puntos. Ganar ese duelo sería un plus en su lucha por el número uno, pues recortaría distancias con Djokovic y le podría dejar todo de cara para el torneo de Turín.
En Italia, el murciano se juega 1.500 puntos, pues el cada victoria en el 'round robin' vale 200 puntos, el pase a la final 400 y el triunfo 500. Lograrlo sería una oportunidad de oro para Alcaraz de repetir por segundo año consecutivo como número uno del mundo y, además, olvidarse de su ausencia en dicho torneo en 2022, cuando es lo perdió por lesión.
Recuperar el liderato mundial sería una gran recompensa para un fantástico curso de Alcaraz, que hasta ahora lleva disputados 72 partidos con un balance de 63 victorias y tan solo nueve derrotas a sus 20 años.
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